Insomnio

Esta enfermedad tan extendida en el mundo moderno, afecta a todos los rangos de edad, consiste en una queja subjetiva de sueño no reparador por mala calidad y/o poca duración, manifestándose con problemas para el inicio o para el mantenimiento del sueño. Además, repercute desfavorablemente en nuestro rendimiento diario. Cerca de un 5% de la población utiliza remedios caseros o se automedica y la otra parte, ni siquiera recibe algún tipo de ayuda porque muchas veces se tiende a menospreciar el insomnio como problema de salud real.

Antes de iniciar medicación para dormir, debes ser prudente, y probar primero estas sugerencias:

  • Sé coherente, disciplinado y constante. Mantén una rutina sueño-vigilia regular, acuéstate y levántate de la cama a la misma hora todos los días. (Ley de vida, Ley de hábito y rutina personal).
  • Deja de utilizar dispositivos electrónicos al menos una hora antes de irte a dormir. (¡Sí, esto incluye tu teléfono celular!), ya está bien de utilizar estos equipos también en la cama.
  • Mantén tu habitación fresca y oscura (nada de humedad, nada de luz, oscuridad total).
  • Haz ejercicio regularmente, pero no lo hagas justo antes de acostarte (deja pasar unas 3-4 horas como mínimo, tu cuerpo necesita desprender calor y enfriarse).
  • No consumas estimulantes como bebidas energéticas, café, ni tampoco fumes por la tarde o por la noche (al menos evita estas sustancias dos horas antes de irte a la cama).
  • No leas, no comas, no veas la televisión en la cama (considera tu habitación y tu cama como el templo personal del sueño y de la intimidad).
  • Intenta que tu última comida del día sea al menos 3 horas antes ir a la cama.
  • No lleves tus preocupaciones a la cama. Cuanto más pienses en ellos, más difícil te será conciliar el sueño (si te agobian demasiado, puedes anotarlos y al día siguiente, cuando estés más despejado mentalmente puedes buscar una solución).
  • Utiliza esta serie de recomendaciones, como un programa básico de vida, tienes que darle toda la importancia que se merece a tu sueño y a tu descanso nocturno, de ello depende que rindas física y mentalmente lo que deseas y puedas llegar al final tu día con todos tus objetivos logrados.